Márquez en la encrucijada
Siempre hay dos puntos de partida en el deporte del motor: la máquina y el piloto. Siempre hay que acercarse a lo que sucede mirando en estas dos cestas. Pero ocurre que una de ellas NUNCA dice la verdad. Del lado de la máquina, los inventos que funcionan son secretos de estado, y los inventos que no funcionan no se desvelan porque exponen las debilidades.
Así que, partiendo de que del lado de la máquina nadie va a decir la verdad, sólo nos queda escuchar al piloto. La foto del fin de semana está en la galería de @GigiSoldano. El busto de Márquez emergiendo entre once personas en el box del #93. 11 tíos de la parte de la máquina buscando soluciones para que el chaval 2 veces Campeón del Mundo en MotoGP pueda volver a ganar.
Por parte del piloto GANAR es la palabra. Cualquier otro puesto se consigue por defecto. Márquez contestó claro en la rueda de prensa de Montmeló: "¿No sería mejor acabar alguna carrera?". Respuesta:"Yo puedo acabar la carrera a 20 segundos del primero, pero no es mi estilo." En esta dinámica de ley de Murphy en la que todo lo susceptible de salir mal saldrá mal, incluso esta respuesta se transformó en un misil a su compañero de equipo, porque Dani Pedrosa volvió al podio, sí, pero a 20 segundos del primero.
Así que si tomamos GANAR como la única VERDAD del piloto, tenemos una primera fuerza en SU UNIVERSO. Ganar pone en compromiso a la empresa que le contrata y paga para que pruebe las ideas de los ingenieros porque si la empresa se equivoca en el desarrollo y el piloto sólo quiere ganar, ahí hay un tema: No está colaborando. Está metiendo oxígeno al fuego, porque en cada caída, en cada over the limit pone en evidencia a la parte de la máquina. Y ¿cómo reacciona esa parte de SU universo? ¿Qué le dice Emilio Alzamora? ¿Qué le dice Santi Hernández? ¿Qué le dice su entorno familiar? ¿Cuál es el mensaje hacia el piloto?
- Tío, ayuda, que esta gente nos echa!... o
- Pasa de todo, tú como siempre. A saco y que arreglen ellos el problema.
Hasta ahora, sea cual haya sido el consejo, el piloto ha decidido que de Viernes a Sábado, él ayuda (en Mugello se olvidó de hacer el tiempo para entrar en la Q2 porque estaba enfrascado en pruebas de electrónica). Pero que el Domingo es suyo. Y va a saco. Y ni la moto aguanta ni él la sujeta. Al suelo. Cero tras cero. ¿Qué hará en Assen?
La palabra GANAR como verdad única del piloto le expone también al UNIVERSO EXTERNO. Ha llegado a MotoGP y ha dictado ley: records de circuito, victorias en remontada, en lluvia, en seco, con flag to flag, de principio a fin, con guerras de adelantamientos interminables... clasificaciones con tres juegos de neumáticos, con spints de 200m, poles en casi todos los circuitos. Por cada caída salvada y triunfo; por cada exhibición, por cada numerito contando las victorias, por cada risotada... el enemigo cargaba una bala. Y ahora están empezando a disparar. Disparan desde Italia: "Márquez pilota poniendo en riesgo al resto de pilotos. En Sepang Iannone no pudo correr porque Marc lo lesionó"- escribe uno de los gurús, Carlo Pernat. En las ruedas de prensa comienzan las encuestas: "¿Os pone en peligro Marc?" Jorge sonríe con tibieza, que es la peor de las sonrisas. Rossi bromea con veneno: "es que es muy cariñoso y le gusta estar cerca de las otras motos." Smith lo para en seco: "Marc no pone en peligro a nadie. Yo sólo veo que evita con todas sus fuerzas la colisión y si es preciso se sale de la pista para arreglar sus problemas." Y en las salas de prensa (Mugello) se aplauden las caídas de Márquez. Ha comenzado el derribo. ¿Qué hará el piloto en este apartado? Hasta ahora lo que hemos visto es lo de siempre: sonrisa sobre sonrisa. Sonrisa a los palos, sonrisa al enemigo, fotos con los aficionados y la tormenta para el motorhome.
Ahora Márquez está en la encrucijada. Es sólo uno de los doce pasos del viaje del héroe. Está metido en la tormenta y según la negocie saldrá debilitado o fortalecido. Llegó niño al Mundial de MotoGP y debe salir hombre. Es ley de vida. Para los que estamos fuera, es un apasionante viaje que presenciar.
Siempre hay dos puntos de partida en el deporte del motor: la máquina y el piloto. Siempre hay que acercarse a lo que sucede mirando en estas dos cestas. Pero ocurre que una de ellas NUNCA dice la verdad. Del lado de la máquina, los inventos que funcionan son secretos de estado, y los inventos que no funcionan no se desvelan porque exponen las debilidades.
Así que, partiendo de que del lado de la máquina nadie va a decir la verdad, sólo nos queda escuchar al piloto. La foto del fin de semana está en la galería de @GigiSoldano. El busto de Márquez emergiendo entre once personas en el box del #93. 11 tíos de la parte de la máquina buscando soluciones para que el chaval 2 veces Campeón del Mundo en MotoGP pueda volver a ganar.
Por parte del piloto GANAR es la palabra. Cualquier otro puesto se consigue por defecto. Márquez contestó claro en la rueda de prensa de Montmeló: "¿No sería mejor acabar alguna carrera?". Respuesta:"Yo puedo acabar la carrera a 20 segundos del primero, pero no es mi estilo." En esta dinámica de ley de Murphy en la que todo lo susceptible de salir mal saldrá mal, incluso esta respuesta se transformó en un misil a su compañero de equipo, porque Dani Pedrosa volvió al podio, sí, pero a 20 segundos del primero.
Así que si tomamos GANAR como la única VERDAD del piloto, tenemos una primera fuerza en SU UNIVERSO. Ganar pone en compromiso a la empresa que le contrata y paga para que pruebe las ideas de los ingenieros porque si la empresa se equivoca en el desarrollo y el piloto sólo quiere ganar, ahí hay un tema: No está colaborando. Está metiendo oxígeno al fuego, porque en cada caída, en cada over the limit pone en evidencia a la parte de la máquina. Y ¿cómo reacciona esa parte de SU universo? ¿Qué le dice Emilio Alzamora? ¿Qué le dice Santi Hernández? ¿Qué le dice su entorno familiar? ¿Cuál es el mensaje hacia el piloto?
- Tío, ayuda, que esta gente nos echa!... o
- Pasa de todo, tú como siempre. A saco y que arreglen ellos el problema.
Hasta ahora, sea cual haya sido el consejo, el piloto ha decidido que de Viernes a Sábado, él ayuda (en Mugello se olvidó de hacer el tiempo para entrar en la Q2 porque estaba enfrascado en pruebas de electrónica). Pero que el Domingo es suyo. Y va a saco. Y ni la moto aguanta ni él la sujeta. Al suelo. Cero tras cero. ¿Qué hará en Assen?
La palabra GANAR como verdad única del piloto le expone también al UNIVERSO EXTERNO. Ha llegado a MotoGP y ha dictado ley: records de circuito, victorias en remontada, en lluvia, en seco, con flag to flag, de principio a fin, con guerras de adelantamientos interminables... clasificaciones con tres juegos de neumáticos, con spints de 200m, poles en casi todos los circuitos. Por cada caída salvada y triunfo; por cada exhibición, por cada numerito contando las victorias, por cada risotada... el enemigo cargaba una bala. Y ahora están empezando a disparar. Disparan desde Italia: "Márquez pilota poniendo en riesgo al resto de pilotos. En Sepang Iannone no pudo correr porque Marc lo lesionó"- escribe uno de los gurús, Carlo Pernat. En las ruedas de prensa comienzan las encuestas: "¿Os pone en peligro Marc?" Jorge sonríe con tibieza, que es la peor de las sonrisas. Rossi bromea con veneno: "es que es muy cariñoso y le gusta estar cerca de las otras motos." Smith lo para en seco: "Marc no pone en peligro a nadie. Yo sólo veo que evita con todas sus fuerzas la colisión y si es preciso se sale de la pista para arreglar sus problemas." Y en las salas de prensa (Mugello) se aplauden las caídas de Márquez. Ha comenzado el derribo. ¿Qué hará el piloto en este apartado? Hasta ahora lo que hemos visto es lo de siempre: sonrisa sobre sonrisa. Sonrisa a los palos, sonrisa al enemigo, fotos con los aficionados y la tormenta para el motorhome.
Ahora Márquez está en la encrucijada. Es sólo uno de los doce pasos del viaje del héroe. Está metido en la tormenta y según la negocie saldrá debilitado o fortalecido. Llegó niño al Mundial de MotoGP y debe salir hombre. Es ley de vida. Para los que estamos fuera, es un apasionante viaje que presenciar.
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| foto @gigisoldano |
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